¿Por qué te «bota de tierra» la vida?

Ahora entiendo -un poco, sólo un poquiiiiito más- como funcionan las señales del Universo/La Fuente/Dios/Energía Divina.- [inserta el nombre que tu uses, aquí]

Un tsunami en mi Zona C’.

Yo estaba en una islita que ya no tenía muchos recursos, pero ahí me sentía bien, tranquilita segura, conocía el terreno.

[mentira]

Bueno… digamos que estaba un poco en alerta con miedo, pero segura…

Tenía goteras en la choza, pero me había entrenado para manejar las goteras y las grietas que las tormentas dejaban. Guerrera; así me creía, fuerte, valerosa ¡Que venga lo que sea! Esta choza se ha convertido en un fuerte… decía… 🙄

[Hello, se llama ‘MODO SUPERVIVENCIA’ ]

Hace más de 8 años, terremotos, tsunamis y tornados vinieron a mi vida a moverme el cielo, la tierra y las aguas de mi planeta, Zona C’.

Me sacó de la luz, me rodeó de aguas oscuras, me revolcó y te puedo decir que ese salvavidas, ya no tenía aire y lo peor… yo que creía que sabía nadar…

Terminé con un salvavidas lleno de parches en medio del océano casi ahogada entre tanta agua ¡¿Por qué a mi?! 😭

Si, esa era una señal.

Si los desastres naturales se convierten en el nuevo ‘constante’ de tu día a día, es porque ha llegado el momento de replantearse el próposito de vida.

Eso incluye, normalmente, comenzar de «0» en algunos o casi todos los aspectos de tu ser, pues la forma, estilo y manera de tu versión anterior no está funcionando, ni te va a funcionar más, lo siento, es así de radical.
Por eso vienen a revolcarte.

Te ponen en versión Beta: Cambios, ensayo y error.

La solución, es confiar y dejarse llevar. Nadie está en tu contra, sólo te están guiando… si, si, vaya que forma de guiar, de la manera más dura.

Es la señal para decirte que ya no sirve ni por ese camino, ni con ese avatar (tu personalidad), ni esos objetivos.

Pero eso sucede porque no escuchamos, ni le entendimos cuando nos lo decían de la forma más amorosita y tierna 🤷🏻‍♀

¿Quiénes nos hablaban?

Los guías, el ángel de la guarda, el Yo Superior, la voz del alma, tu corazón, Dios… [no sé como le llamas tú, inserta aquí el nombre que tu usas]

👿😡😈🦹🏻‍♀️🦹🏻‍♂️

El ego, la queja, una niñez en estado de alerta, la desconfianza, necesidad de controlar por miedo, la permanente pelea, ‘la culpa del otro’, inconformidad, la envidia, la ingratitud, falta de autoestima, desmerecimiento, falta de amor propio, la inmadurez, la soberbia, la terquedad, todo eso, son las voces de los diablillos y arlequines distractores que no dejan que la voz de la torre de control y la luz del faro interno se manifiesten como la verdadera guía a seguir.

🎪 Es como si tus pensamientos habitaran en un mal circo, con mucho desorden, ruido, drama, show y escándalos.

Si, hay villanos, pero están dentro de uno.

Nuevas metas nuevo propósito de vida

Y así fue como me encontré más perdida que Wilson y Tom Hanks, ya ni sabía si quería ser diseñador gráfico, ni que era lo que tenía que hacer con mis talentos, ni para dónde ir, ni cómo ser, nada, nada, nada, perdida, aturdida, triste, asfixiada… Pfff 😔 sólo aguas oscuras…

Estoy entregada a dejarme guíar, porque quiero guiar a otros, pero primero, el caos y proceso de ordenar, debe pasar por mi misma, desde adentro. – Siempre es de adentro hacia afuera, SIEMPRE.

Éstos últimos 3 años, ya no voy con un salvavidas, nunca tuve tabla de surf, tenía demasiado ego para ser surfista y fluir, ¡Pelear y resistir, damas y caballeros! [Que agotador estilo tenía ¿no?]

⚓

Me forzaron a bajarme del barco, aprender sobre las pausas, la contemplación y la meditación. Las maravillas de estar con un tecito caliente haciendo silencio, sólo el té y yo – sin el móvil en la mano 🤳🏻 (Que también me tomo mi té leyendo el teléfono celular, tampoco al extremo 😋)

Me hice un lugarcito en un muelle de una isla nueva que sigo explorando. Voy en mi nuevo barquito; todavía aprendiendo a manejar las velas.

🌙

Arribo a mi puerto con menos daños y zarpo a nuevas aventuras cada vez más lejos, con menos miedos y más frecuencia; eso si, a mi propio ritmo, escribiendo bitácoras y aprendiendo a observar la Luna con otros ojos, que me avisa cuando viene subiendo la marea.

Algunas veces me toca cambiarme la ropa mojada de la tormenta y a veces ando bien enojada porque el agua me ha entrado hasta en las botas 😣

Vaya que estoy agradecida por esta lecciones marítimas, yo casi no salía de tierra y eso no lo había notado.

Ceci corazón de león humano.

Sigo siendo guerrera y resiliente, sólo que ahora le entiendo más rápido cuando parar y abrazo el ‘ no saber ‘. – Eso también me lo eseñó el tsunami, no lo sé todo y quiero seguir, contemplando, comprendiendo y aprendiendo a observarme.

🆘

Y pedir ayuda. Soy coach, pero entendí la importancia de chequearme y atender mis emociones y mi mente mínimo dos veces al año con otro colega. Que la situación esté de emergencia para irse a buscar asistencia médica no es la mejor estrategia.

Estoy a la expectativa, de cómo irá resultando este camino de hacer servicio – no lo voy a negar… la lección de «soltar el control» sigue en supervisión, y bueno… todavía le tengo miedo al agua, pero ya tengo radio con conexión a la torre de control, aunque a veces pierda la señal, reencontré mi brújula y ahora se a dónde mirar para encontrar la luz del faro cuando me siento perdida.-